na 13

Caracas,Junio 16/2020 Cuentos de Cuarentena en 110mtrs2 Autora: María Isabel Valero Espinal ( entrega 13) (Desde Venezuela) TÍTULO: SUMANDO DOMINGOS Tilingo tilingo quedan suspendidos los casorios del domingo Los Templos religiosos en espera de milagro permanecen cerrados.. Han llegado las chicharras. A altos decibeles cantan. Hoy un nuevo domingo. He decretado día de ocio y recreo en mi balconjardin. Un espacio anchilargo, con paredes de ladrillos y espectacular vista en degrade de verdes y azules. Como ha prosperado la semilla de aguacate. Crece hermosa la planta.. y haciendo honor al día programado, ociosamente la mido con la cinta métrica de costura.!50 ctms. de alto!! Pronto me alcanzara en tamaño. Acaricio las hojas. La cafetera activada perfuma los ambientes, mientras en traje de dormir preparo un sándwich con queso blanco rallado y mantequilla. Para más privilegio un par de huevos rancheros en cazuela de barro y un refrescante jugo de naranjas para apaciguar el antojo. Con todo dispuesto en la bandeja de paticas me instalo en el mirador privado. Un desayuno principesco para un 13avo domingo sin paseos. Como elixir de dioses me deleito con una humeante taza con café. Siento que levito en turismo de contemplación. Hipnotizada admiro la magnífica obra del Creador con sus pinceles. Extrañamente por él especio aéreo surca una avioneta. A pesar de mis infundados temores a volar, me hago pasajero y ocupo un lugar en la frágil nave. Así dejándome llevar, entre nubes voy cruzando el túnel del tiempo. La brújula indica rumbo al pasado. Medio siglo en retroceso. Sin Noche ni día se juntan sol luna y estrellas. Sin horas desciendo con sombrilla a lo Mary Poppins, pero no precisamente en el barrio Inglés descrito por Pamela Lyndon. En sensación de suave paracaídas, diviso a mis pies un larguísimo Itsmo entre mar y laguna. Extensa pista de aterrizaje. La brisa marina juguetea. Está sola la playa. Bajo el cobijo de la palma me trago el paisaje. El pequeño Radio transistor recrea mis oídos. La visión se pierde más allá del horizonte. Cada ola trae un recuerdo. Froto mis ojos.. !!Ahi están de vuelta mis niños!! Ajenos al mundo adulto. Puedo verlos correr y reír. Sus pequeñas manos sostienen el tobito y la pala en afán de construir el más fabuloso castillo de arena. Corretean, casi vuelan en libertad de gaviotas. Cavan queriendo llegar a China y gritan eufóricos cuando el mar aniega las obras. Cuál hormiguitas rebuscan en la cesta del picnic. Me invitan a un chapuzón y tomados de las manos al un dos tres entre espumas retozamos. Asidos a mi cuello, en la acuática fiesta del amor me regalan la dicha de ser mamá. Las secuencias de las tiernas escenas se suceden vivas. Imágenes impresas. Mis niños bailan para mi en el entarimado del colegio. Ha concluido otro año escolar. De sus pechos penden medallas y con emoción desbordada me piden ayuda para desatar la cinta del rollito de los diplomas. Llega diciembre y las cartas para El Niño Jesus garabatean deseos. Siempre encabezando que se han portado bien. En el Pesebre los pastores y animalitos rotan de lugar a capricho y bajo el pino la curiosidad ordena y desordena regalos en la impaciente espera del día de Navidad. Entre serpentinas y papelillos, el rey Momo anuncia carnaval. Posesionados en sus personajes, Superman, Caperucita, el Zorro, la gitana y tantos se unen al desfile año tras año. Y van creciendo mis niños. La cobija del amor los arropa en sus camitas. Con la señal de la Santa Cruz en sus frentes duermen recargando energía.. Me veo tan joven. Sin los surcos que me han graduado. Olas van, Olas vienen.. La Universidad, la madurez. El vuelo del nido. Dios me habla a través de los ojos de mis hijos cuya transparencia me dice que aún sin manual lo hicimos bien. Debo hablar en plural. Crédito también merecido al buen progenitor. Un beso en mi frente me ha traído de vuelta al balconjardin. Mis chicos se han hecho adultos. Junto a ellos mis amadas nietas. Los retoños. Han venido a visitarme. Parecen astronautas salidos de alguna película espacial. El odioso virus obliga a la vestimenta. Aún adormilada, Jugando a la gallinita ciega, me tapan los ojos y en enredadera de abrazos soy llevada a la mesa del comedor. Han logrado sorprenderme con un apetecible arreglo frutal. !!Estallan los aplausos!! En el tropel algunas fresas ruedan sobre el mantel. Con curiosidad retenida, a coro me piden les cuente lo que soñé.. PD) Algunas líneas han sido extraídas de un escrito mayor dedicado a mi rebaño en año 2005) Enviado desde mi iPhone , o

Comentarios

Entradas populares de este blog

BICHOLANDIA

Analisis

METROPOLI (autora marisabel valero espinal) 2012*